Esta madrugada era el cambio de hora, pero el único despertador al que no había cambiado la hora, sonó una hora antes, así que mi chica y yo nos despertamos a las 6 de la mañana.
Aseo, desayuno, paseo a Boby y a las 07:20 en marcha hacía Tordesillas. Mañana gris en Madrid y alta probabilidad de lluvia, según lo leído en internet, hacen presagiar una carrera difícil.
Llegamos a Tordesillas a las 09:00, aparcamos muy cerca del centro y nos dirigimos a la Plaza Mayor antes que nada para retirar el dorsal y el chip.
Nos sobra mucho tiempo para la salida, así que nos metemos en una cafetería donde Vicky desayuna y yo tomo el segundo café de la mañana, también aprovechamos para leer la prensa dominical.
La salida es a las 10:30 desde la Plaza Mayor de esta histórica y monumental ciudad vallisoletana famosa por la firma del acuerdo, donde los reinos de Castilla y Portugal fijaban los límites de las tierras americanas ya descubiertas o por descubrir. Corría el año 1494.
Cruzamos el río Duero por el puente de piedra y hacemos los primeros kilómetros por la carretera de Salamanca, el kilómetro 5 está de nuevo en la Plaza Mayor, ahora salimos de ciudad pasando un elevado sobre la A-6, para dirigirnos al pueblo de Matilla de los Caños, donde está situado el kilómetro 11, hasta aquí con el viento favorable.
Al girar en el pueblo cogemos otra carretera que nos llevará de nuevo a Tordesillas, pero esta vez con el viento de cara, hasta el kilómetro 15. Viento racheado, bastante molesto.
Voy cómodo en un grupo de unos 10 corredores, con dos mujeres (más tarde me enteré que eran madre e hija); pero decido tirar hacía delante, pues me encuentro con fuerzas.
Los últimos 3 kilómetros se me hacen eternos, con la vista de Tordesillas en el horizonte.
Por fín dentro de la villa, cogemos la calle de Santa María por la que se accede a la Plaza Mayor. Con el arco de meta a poco más de 20 metros, veo entre el público a Vicky, que me anima y me saca una foto.
Al final hago 1h46'30'', bastante satisfecho. Bolsa de corredor bastante buena con medalla, camiseta, botella de vino de rueda, pulsera, braga polar y vituallas varias.
El resto del día se resume en comida en un restaurante de Cuéllar, paseo y café en la ciudad de Segovia y regreso a Torrejón de Ardoz donde he dejado a mi mascota 12 horas solito.
Gracias amor mío por haberme acompañado en esta carrera y hacerme Feliz. TE QUIERO.
Aseo, desayuno, paseo a Boby y a las 07:20 en marcha hacía Tordesillas. Mañana gris en Madrid y alta probabilidad de lluvia, según lo leído en internet, hacen presagiar una carrera difícil.
Llegamos a Tordesillas a las 09:00, aparcamos muy cerca del centro y nos dirigimos a la Plaza Mayor antes que nada para retirar el dorsal y el chip.
Nos sobra mucho tiempo para la salida, así que nos metemos en una cafetería donde Vicky desayuna y yo tomo el segundo café de la mañana, también aprovechamos para leer la prensa dominical.
La salida es a las 10:30 desde la Plaza Mayor de esta histórica y monumental ciudad vallisoletana famosa por la firma del acuerdo, donde los reinos de Castilla y Portugal fijaban los límites de las tierras americanas ya descubiertas o por descubrir. Corría el año 1494.
Cruzamos el río Duero por el puente de piedra y hacemos los primeros kilómetros por la carretera de Salamanca, el kilómetro 5 está de nuevo en la Plaza Mayor, ahora salimos de ciudad pasando un elevado sobre la A-6, para dirigirnos al pueblo de Matilla de los Caños, donde está situado el kilómetro 11, hasta aquí con el viento favorable.
Al girar en el pueblo cogemos otra carretera que nos llevará de nuevo a Tordesillas, pero esta vez con el viento de cara, hasta el kilómetro 15. Viento racheado, bastante molesto.
Voy cómodo en un grupo de unos 10 corredores, con dos mujeres (más tarde me enteré que eran madre e hija); pero decido tirar hacía delante, pues me encuentro con fuerzas.
Los últimos 3 kilómetros se me hacen eternos, con la vista de Tordesillas en el horizonte.
Por fín dentro de la villa, cogemos la calle de Santa María por la que se accede a la Plaza Mayor. Con el arco de meta a poco más de 20 metros, veo entre el público a Vicky, que me anima y me saca una foto.
Al final hago 1h46'30'', bastante satisfecho. Bolsa de corredor bastante buena con medalla, camiseta, botella de vino de rueda, pulsera, braga polar y vituallas varias.
El resto del día se resume en comida en un restaurante de Cuéllar, paseo y café en la ciudad de Segovia y regreso a Torrejón de Ardoz donde he dejado a mi mascota 12 horas solito.
Gracias amor mío por haberme acompañado en esta carrera y hacerme Feliz. TE QUIERO.
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